Existen diversas malas prácticas al volante que muchos conductores han establecido como rutina y que pueden acabar en accidente, por ello, si vas a coger o alquilar un coche, debes intentar evitarlas. Te contamos algunas de ellas:
– Conducir esquivando. Si nuestra forma de conducir es tratando de esquivar cada vehículo que se pone en nuestro camino, podemos terminar encontrándonos en una situación difícil con poco margen de maniobra.
– Incorrecto uso de las luces. Muchos conductores no usan las luces correctamente o circulan con alguna luz fundida. Es indispensable que antes de circular, especialmente durante la noche, nos aseguremos de que nuestras luces e intermitentes funcionan correctamente. No solo lograremos aumentar la visibilidad, sino que alertaremos de nuestra presencia a otros conductores.
– La música. No quiere decir que escuchar música suponga un peligro al conducir. No obstante, buscar una canción en la radio puede hacer que perdamos la atención el tiempo necesario para que suframos un accidente. Lo recomendable es tener nuestros canales de radio preferidos memorizados y no fijarnos en la pantalla a la hora de pasar las canciones.
– Debemos fijarnos en nuestra condición física. Muchas personas cogen el coche cuando su condición física no es la adecuada. No solo hablamos de las personas que conducen después de haber bebido o consumido otro tipo de sustancias estupefacientes. Sino de aquellas que conducen con mala visibilidad, sin llevar sus gafas, aunque las necesiten, con una escayola, después de haber tomado medicamentos que crean somnolencia, etc.
– Usar el móvil mientras conducimos. Aunque resulte obvio que el uso del teléfono móvil mientras conducimos está totalmente prohibido, varios estudios defienden que el 83% de los conductores utilizan el móvil mientras circulan. La pérdida de atención que supone, pone en peligro la vida de los ocupantes del vehículo, pero también la del resto de personas que lo acompañan en carretera.
Es importante que tengamos claro nuestro estado físico antes de emprender un trayecto en coche.
Lo mismo ocurre con el uso de intermitentes, que muchas personas no emplean y que son imprescindibles para que el resto de coches puedan prever nuestros movimientos y circular en consecuencia.